Cuando tratamos de perder peso, muchas veces eliminamos de nuestra dieta la mayor cantidad de azúcar y grasas saturadas que nos sean posible, por lo que el refresco de dieta es una opción que puede parecer muy atractiva, ya que las etiquetas indican que no contienen azúcar ni calorías, por lo que creemos que podemos beberlos indiscriminadamente.
El lado positivo de estas bebidas es que nos ahorran las calorías extra que encontramos en las bebidas azucaradas como las sodas y los jugos, por lo que podemos beberlas en fiestas y reuniones, es decir, de forma esporádica o cuando nos encontramos en regímenes estrictos, para satisfacer el antojo de algo dulce que no afecte nuestra cintura.
Además de las sodas, encontramos chocolates, gelatinas y otros postres elaborados con aspartame, aspirina y sacarosa, endulzantes artificiales que sustituyen al azúcar.
Sin embargo, el exceso en edulcorantes artificiales tiene un lado muy oscuro, ya que tienen un sabor dulce más intenso que el azúcar, pueden disminuir la capacidad para saborear los alimentos endulzados de forma natural, como las frutas. Al sentir menos intensamente el dulce, es más fácil abusar de los postres o alimentos ricos en azúcar, poniendo en riesgo la salud y la dieta.
Además, diversos estudios han comprobado que los edulcorantes tienen el mismo efecto del azúcar en el cuerpo, es decir, estimulan la producción de insulina, por lo que nuestro cuerpo acumula grasa corporal. Investigadores de la Universidad de Texas encontraron que, en 10 años, los amantes de las sodas de dieta habían aumentado un 70% el diámetro de sus cinturas, en comparación con los no bebedores de sodas.
Los participantes del estudio que bebían más de dos sodas “light” al día tuvieron un incremento de su cintura del 500%.
Es cierto que los refrescos de dieta no contienen calorías, sin embargo confunden al cuerpo, pero también a quien las consume, ya que es más probable justificar el consumo de una hamburguesa con queso y papas fritas si creemos que el refresco no nos engordará. O añadir una rebanada más de pizza o comer un postre.
El consumo de bebidas light debe ser limitado, optando por opciones más saludables como agua de frutas, té o agua simple. El también edulcorante, pero de origen natural: stevia es una planta de origen brasileño que puede endulzar nuestros alimentos de forma natural, basta con hervir la planta en agua para infusión y guardarla para preparar café, té, agua de sabores o beber como agua del día.
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